El éxito es hacer lo mejor de lo que decidas hacer en el momento en el que decidas hacerlo. Se trata de alcanzar tu estado ideal, enfocarte en el momento presente y dar tu mejor versión. Tienes que jugar todo el rato al 100% y con la mejor actitud. Porque la actitud va a multiplicar tus posibilidades de éxito. Te va a dar la energía y la fuerza que necesitas para marcar la diferencia.
Para alcanzar el éxito, antes tiene que mirarte, conocerte y entenderte bien. Es importante ser consciente de las limitaciones y de las barreras personales que tienes y que tienes que superar para seguir adelante, sean barreras deportivas, profesionales o personales. Ante una limitación, crea un nuevo hábito potente y mantenlo. Ayúdate de vitaminas para que nada te pare. Y cuando consigas superarla, habrás mejorado, estarás creciendo y ya habrás ganado un tanto. Y podrás enfrentarte a tu próximo límite.
Trabaja la defensa y cuando lo tengas, pasa a un golpe nuevo. Un golpe detrás de otro. Un hábito detrás de otro. Porque cambiarlos es difícil y hay que hacerlo de forma ordenada, estructurada y segura. Así vas creciendo y te diriges paso a paso hacia tus metas con energía y dando lo mejor de ti mismo.